La facil del Naranjo de Bulnes

        EN LA SENCILLEZ ESTA EL GUSTO:

        La emoción de una gran cumbre, que maravillosa sensación la que sentimos en cada cumbre que conquistamos, para algunos es vértigo no por la altura sino por mirar atrás en el tiempo y darse cuenta de las dificultades, obstáculos y esfuerzos que hubo que superar para poder alcanzarla y llegar a este momento, nada como disfrutar de un monte mítico como el picu Urriellu, (Naranjo de Bulnes) y más si la conseguimos tras realizar una gran ruta, da igual el nombre o apellidos que tenga, aquí arriba se te pasan todos los temores. Esta ruta puede ser también la Sur directa de los Martínez, es la que hicimos nosotros hoy, algunos le dicen la fácil y puede que lo sea, al menos en la dificultad que nos vamos a encontrar en su recorrido, pero cada cual con su nivel, alto o bajo, porque puede ser que esta ruta sea para muchos su primera vez y la más difícil que hayan conseguido hasta ese momento y eso hay que valorarlo y saber apreciarlo. Solo un detalle, de las 6 cordadas que coincidimos este día en la sur, todas ellas incluida mi compañera era su primera gran ruta a una montaña.

        Es como un primer escalón seguro que más adelante vendrán otros, no tiene mucho que ver pero hace varios años escribía sobre la conclusión de una nueva apertura en esta misma montaña, “El Último Eslabón” 2.009, aquella ruta fue una grandísima y difícil escalada, pero esa nueva ruta tenía un significado especial para mí porque sería mi última apertura en la montaña, al menos es lo que pensaba en aquel momento, por ese motivo volví a tener casi las mismas emociones y sensaciones que la primera escalada por la fácil de la Sur, pero fueron emociones diferentes y sobre todo con sabor a despedida, o tal vez un hasta pronto porque 2 años más tarde volvía a pisar la cumbre por otra nueva ruta, cosas del amor, siempre vuelvo a caer en la tentación. Es difícil saber el devenir de la vida y lo que sucederá meses o años después, lo que ahora piensas que es lo último que haces puedes olvidarte y repetir cayendo de nuevo en la misma tentación, es una rueda constante y lo cierto es que tengo que aprovechar cada oportunidad que tenga, al menos mientras pueda y me da igual que sea por la fácil. 

        Pero volvamos a la cumbre, al final todos compartimos lo mismo, los escasos metros que tiene esta pequeña cima, independientemente de la ruta que hayamos conseguido, todos llegamos a lo más alto, al mismo lugar, ya no hay nada más arriba, ni siquiera el mejor escalador del mundo puede subir más alto, bueno yo al menos me subí a los brazos de mi amigo Rubén, algo es algo.

        Tuve la ocasión de compartir y acompañar a muchos amigos que hacían por 1ª vez una escalada, hasta la cumbre de esta montaña y en todos ves el mismo o parecido semblante cuando la alcanzan, las expresiones de sus caras no varían mucho, algunos gritan con fuerza, algunos lloran o se les ve brillar los ojos aunque intenten ocultarlo, otros en silencio expresan sus emociones sin dejar escapar sus sentimientos y disfrutan a su manera, yo pase por todas esas mismas experiencias, aquí arriba te olvidas de todo por unos minutos, ya no existe el dolor que hubo que superar para alcanzar este momento, más tarde ya pensaremos en el descenso que será otra historia y después de esto empezaremos a pensar en otros objetivos y seguro que como los peces y los panes se multiplicarán.

        Sigo disfrutando de esta misma ruta cada vez que la consigo, me trae los buenos recuerdos de aquella primera vez que la consigo, son emociones y sensaciones que perduran como el tiempo lo mismo que las piedras, cuando consigo la cima por otra ruta diferente ya no exteriorizo aquellas emociones iniciales, aunque siempre queda algún rescoldo, ya son muchas las cimas conseguidas, muchas fotos al lado de la virgen de piedra pero cuando regreso con otro futuro alpinista, que seguro lo será después de esta escalada, recupero de nuevo la sonrisa porque un chico o una chica alpina consigue por vez primera esta grandiosa montaña.

        Seguro que volveré a tener nuevas oportunidades de regresar con otros amigos a esta misma pared y a esta misma ruta, no me gusta decir la fácil, seria desvirtuar la realidad ya que por allí no sube cualquiera, en esta pared y en esta ruta se forjaron grandes hazañas, también algunas tragedias, cada día seguirán escribiéndose nuevas historias, aunque sean escaladores anónimos o noveles pero para muchos será su primera escalada al picu más famoso, al Naranjo de Bulnes y por mucho tiempo que pase, seguro que guardaran un buen recuerdo de aquella escalada que cambio su vida y que posiblemente gracias a esta escalada se convierta en su principal afición, lo mismo que me ocurrió a mí.

Ynma después de conseguir su cumbre

        Este viaje también me valió para recuperar y ver a viejos amigos que hacia años no veía, pero también para ver viejos nuevos enemigos , pero de todo sacas conclusiones y aprendes con solo escuchar a gente que de verdad sabe hablar, nos podemos hacer mas viejos pero nunca acabaremos de aprender las lecciones que da la vida.