FRESNIDIELLU
En mi caso, yo tengo 2 montañas favoritas, que desde empecé a escalar me marcaron de forma especial, el Picu Urriellu, que supongo es compartida por muchos de vosotros ,no hay otra igual en España, todo lo que pueda decir del Picu quedaría siempre corto, ya que es sobradamente conocido.
Pero hay otra montaña, mucho más modesta, en altura y en historia, poco conocida fuera de los círculos alpinisticos Asturianos, el pico Fresnidiellu, 1.470 m., minúscula comparada con otras cercanas y hasta no hace muchos años pasaba totalmente desapercibida para la gran mayoría de los montañeros y escaladores que caminaban por las vegas de Sotres dirección a Aliva.
Que sea una de mis montañas favoritas tiene buena explicación, además de ser una montaña bonita, fue aquí donde abrí mi primera ruta de montaña acompañando a mi gran amigo Iñaki y precisamente en pleno invierno, un 21 de enero de 1.983, aquella vía me marco de tal manera que a partir de entonces, observo todas las montañas de forma golosa, dibujando imaginarias líneas en sus paredes soñando escalarlas algún día , los siguientes 6 años, el pico Fresnidiellu fue casi un coto privado ya que los escaladores continuaban ignorando sus cualidades.
Esto me permitió abrir las mejores rutas, en total 20 itinerarios, que fui combinando con la apertura de otras montañas, pero era Fresnidiellu en donde podía hacerlo durante todo el año, sobretodo en épocas de frio, en verano se hace casi insoportable escalar por el calor. Algo importante para recordar y conocer para el alpinismo gallego, es que el primer escalador que hizo cumbre fue Antonio Rapallo Rubio, de Villagarcia de Arousa, gran escalador y conocedor de Picos de Europa, en aquella ocasion, acompañaba al gran Alfonso Martinez, que abrio una de las primeras rutas del Naranjo de Bulnes , la Sur directa de los Martinez , en su escalada a Fresnidiellu el objetivo de aquel dia de , fue la impresioante aguja que destaca sobre todo lo que le rodea, de hecho, la aguja lleva el nombre de su mujer, Aguja Carmucha, posiblemente para muchos sea una sorpresa , yo la bautice como aguja Fresnidiellu antes de enterarme de la escalada anterior.
Después del obligado recuerdo, paso a relatar otra historia también vivida en la misma pared, pero de esta hace muy pocos días, el 25 de Octubre, desde mi última ruta abierta, habían pasado nada menos que 20 años y 6 meses, con la vía Flash, pasan los años pero nunca las ganas de escalar en montañas como Fresnidiellu
La pared Este empieza a estar saturada de vías, alguna incluso comparte reunión con otras, yo no quería contribuir más en la confusión y el caos que supone escalar zonas así, no en mi montaña. A la derecha del pico, aun existe un terreno de aventura virgen, que parece han dejado para que sea yo el quien tenga el honor de dar el visto bueno , en fin, ironías aparte, parece increíble que aun no existiera ruta alguna.
Dirijo mis pasos hacia la base de la pared y recuerdo que hace años quise abrir en esta zona una vía, incluso llegamos a escalar un largo, pero la abandonamos para realizar otros proyectos, no sé si mejores o peores, pero quedo en eso, en un proyecto inacabado. La ruta queda con el nombre de “Terra Meiga”, una dificultad de M.D., en un horario de 5 h., primera ascensión, se encuentra semiequipada, solo 4 spit, 2 en reunión, el resto puentes de roca y lo que queramos o podamos meter, lo cierto es que no hay mucha fisura, en general es expuesta, sobretodo los tramos de hierba, en la canal de salida.
Pero aparte de la dificultad y características de esta nueva ruta me quedo con las sensaciones del reencuentro con mi pared favorita, son emociones diferentes y que no puedo sentir en otra montaña . después vinieron otras muchas rutas, algunas en la misma montaña, pero fue la primera la que dejo una huella tan profunda que aun puedo recordar, sentir emociones y sensaciones vividas aquel día y de eso hace ya mucho tiempo
Creo que todos los montañeros y alpinistas tenemos una montaña especial en la que siempre pensamos y tenemos presente en futuras escaladas o ascensiones, ya sea porque nos gusta su forma o por otros motivos personales.
En mi caso, yo tengo 2 montañas favoritas, que desde empecé a escalar me marcaron de forma especial, el Picu Urriellu, que supongo es compartida por muchos de vosotros ,no hay otra igual en España, todo lo que pueda decir del Picu quedaría siempre corto, ya que es sobradamente conocido.
Pero hay otra montaña, mucho más modesta, en altura y en historia, poco conocida fuera de los círculos alpinisticos Asturianos, el pico Fresnidiellu, 1.470 m., minúscula comparada con otras cercanas y hasta no hace muchos años pasaba totalmente desapercibida para la gran mayoría de los montañeros y escaladores que caminaban por las vegas de Sotres dirección a Aliva.
Pero esta montaña tiene algo que carecen los otros picos, las especiales características, su pared Este, la calidad de la roca, su orientación, su equipación la aproximación de solo 30’ hasta la base y esa pequeña altura a la que me refería antes, es ahora en época de frio cuando nos podemos aprovechar de su situación estratégica para poder escalar, cuando todo Picos de Europa, esta nevado y obligaría a cargar con un buen peso en la mochila, la escalada en Fresnidiellu es casi veraniega.
Que sea una de mis montañas favoritas tiene buena explicación, además de ser una montaña bonita, fue aquí donde abrí mi primera ruta de montaña acompañando a mi gran amigo Iñaki y precisamente en pleno invierno, un 21 de enero de 1.983, aquella vía me marco de tal manera que a partir de entonces, observo todas las montañas de forma golosa, dibujando imaginarias líneas en sus paredes soñando escalarlas algún día , los siguientes 6 años, el pico Fresnidiellu fue casi un coto privado ya que los escaladores continuaban ignorando sus cualidades.
Esto me permitió abrir las mejores rutas, en total 20 itinerarios, que fui combinando con la apertura de otras montañas, pero era Fresnidiellu en donde podía hacerlo durante todo el año, sobretodo en épocas de frio, en verano se hace casi insoportable escalar por el calor. Algo importante para recordar y conocer para el alpinismo gallego, es que el primer escalador que hizo cumbre fue Antonio Rapallo Rubio, de Villagarcia de Arousa, gran escalador y conocedor de Picos de Europa, en aquella ocasion, acompañaba al gran Alfonso Martinez, que abrio una de las primeras rutas del Naranjo de Bulnes , la Sur directa de los Martinez , en su escalada a Fresnidiellu el objetivo de aquel dia de , fue la impresioante aguja que destaca sobre todo lo que le rodea, de hecho, la aguja lleva el nombre de su mujer, Aguja Carmucha, posiblemente para muchos sea una sorpresa , yo la bautice como aguja Fresnidiellu antes de enterarme de la escalada anterior.
Después del obligado recuerdo, paso a relatar otra historia también vivida en la misma pared, pero de esta hace muy pocos días, el 25 de Octubre, desde mi última ruta abierta, habían pasado nada menos que 20 años y 6 meses, con la vía Flash, pasan los años pero nunca las ganas de escalar en montañas como Fresnidiellu
La pared Este empieza a estar saturada de vías, alguna incluso comparte reunión con otras, yo no quería contribuir más en la confusión y el caos que supone escalar zonas así, no en mi montaña. A la derecha del pico, aun existe un terreno de aventura virgen, que parece han dejado para que sea yo el quien tenga el honor de dar el visto bueno , en fin, ironías aparte, parece increíble que aun no existiera ruta alguna.
Dirijo mis pasos hacia la base de la pared y recuerdo que hace años quise abrir en esta zona una vía, incluso llegamos a escalar un largo, pero la abandonamos para realizar otros proyectos, no sé si mejores o peores, pero quedo en eso, en un proyecto inacabado. La ruta queda con el nombre de “Terra Meiga”, una dificultad de M.D., en un horario de 5 h., primera ascensión, se encuentra semiequipada, solo 4 spit, 2 en reunión, el resto puentes de roca y lo que queramos o podamos meter, lo cierto es que no hay mucha fisura, en general es expuesta, sobretodo los tramos de hierba, en la canal de salida.
Pero aparte de la dificultad y características de esta nueva ruta me quedo con las sensaciones del reencuentro con mi pared favorita, son emociones diferentes y que no puedo sentir en otra montaña . después vinieron otras muchas rutas, algunas en la misma montaña, pero fue la primera la que dejo una huella tan profunda que aun puedo recordar, sentir emociones y sensaciones vividas aquel día y de eso hace ya mucho tiempo